Internacional

Violentas protestas contra la misión de la ONU en RD Congo dejan ocho muertos

La tensión en República Democrática del Congo por el rechazo que está generando la continuidad de la misión de Naciones Unidas en el país ha desatado una ola de violencia que se ha cobrado ya al menos ocho vidas.

Este martes, la misión de la ONU en RD Congo (MONUSCO) confirmó que perdió a tres trabajadores de su personal, dos policías militares y un soldado, en un ataque perpetrado contra sus instalaciones en el este del país, en palabras de Farhan Haq, uno de los portavoces de Naciones Unidas.

Horas antes, el gobierno congoleño había informado de que los disturbios desatados el lunes en la ciudad de Goma, capital de la región oriental de Kivu, habían costado la vida a cinco personas, sin dar detalles sobre las víctimas, el episodio más grave de una ola de ataques contra la presencia de la MONUSCO en el país.

El portavoz diplomático confirmó que «cientos de personas» habían participado en los ataques contra varias instalaciones de la ONU, en particular contra la sede del Programa de la ONU para el Desarrollo (PNUD) en Goma, donde fueron «repelidos» por guardias de seguridad.

En otros lugares que no precisó, los atacantes llegaron a quemar algunas de las instalaciones de la organización internacional, que requirieron apoyo del ejército regular de la RDC.

Ante esta situación, la ONU tuvo que evacuar a gran parte de su personal en Kivu, dado que los ataques y el clima de rechazo aún continúan, reconoció.

Añadió que estos ataques son producto de un clima de hostilidad, azuzado principalmente desde las redes sociales, contra la presencia de la ONU; sin embargo, dijo que esto no significa que la misión haya fracasado, pues la situación habría sido mucho más violenta en ausencia de la fuerza de paz, dada la proliferación de grupos armados en el este del país.

El asalto se produjo después de que, a mediados de julio, el presidente del Senado congoleño (Cámara Alta), Modeste Bahati Lukwebo, acusara a la Monusco de no ser efectiva y exigiera su retirada.

Desde 1998 el este de la RDC está sumido en un conflicto alimentado por las milicias rebeldes y los ataques de los soldados del Ejército, pese a la presencia de la Misión de la ONU, con unos 14 mil efectivos desplegados.